Ögedei Khan y el Imperio Mongol

Tras la muerte de Gengis Kan en 1227, el Imperio Mongol pasó a ser gobernado por sus hijos y nietos. Aunque no pudo ver la culminación de su vasta expansión, su legado fue continuado por su descendencia, que dividió el imperio en varios khanatos. Después de la muerte de Gengis Kan, su tercer hijo, Ögedei Khan, fue elegido Gran Khan, el líder supremo del Imperio Mongol. Bajo su liderazgo, el imperio continuó su expansión, consolidando los territorios conquistados y fortaleciendo el poder central. Ögedei logró imponer su autoridad sobre los khanatos y llevar a cabo campañas adicionales.

Ögedei fue proclamado Gran Khan del Imperio Mongol en 1229 después del descarte de sus hermanos, un evento que marcó el inicio de una era de expansión aún mayor. Fue realmente Ögedei quien lo organizó y lo expandió de manera significativa. Una de las primeras acciones de Ögedei fue continuar con la expansión hacia el oeste. En 1230, inició la invasión del Imperio Khwarezmida, que había sido destruido por su padre, pero aún quedaban focos de resistencia en la región. Durante este período, los mongoles se expandieron aún más hacia el norte y el oeste, llegando a la región del Cáucaso y ampliando el control mongol sobre Persia y Asia Central.

Retrato de Ögedei Khan en túnica blanca, miniatura de Rashid al-Din.

Retrato de Ögedei Khan en túnica blanca, miniatura de Rashid al-Din.

Simultáneamente, Ögedei y sus generales, como Subotai, llevaron a cabo una serie de campañas en Europa del Este.

Durante el reinado de Ögedei Khan, la capital del Imperio Mongol, Karakorum, experimentó un crecimiento significativo. Bajo su dirección, la ciudad se transformó en un próspero centro cultural y administrativo. Se construyeron notables obras, como el palacio imperial de Ögedei, que fue un símbolo de su poder y de la riqueza de su imperio. También se erigieron templos budistas, iglesias cristianas y mezquitas musulmanas, reflejando la diversidad religiosa del imperio. Un hito destacado fue la gran muralla de Karakorum, una estructura defensiva que protegía la ciudad. Además, se instaló un sistema de carreteras que facilitaba el comercio y la comunicación, y se consolidaron mercados que atrajeron a comerciantes de toda Asia y Europa, convirtiendo a Karakorum en un punto neurálgico de intercambio cultural y económico.

En 1232, durante el reinado de Ögedei Khan, los mongoles continuaron su campaña contra la dinastía Jin. Durante el asedio a Kaifeng en 1232, los mongoles, bajo el liderazgo de Ögedei Khan, se enfrentaron a una feroz resistencia. La ciudad estaba protegida por murallas sólidas, pero los mongoles usaron avanzadas tácticas de asedio para superarlas. Utilizaron torres de asedio, catapultas para lanzar proyectiles pesados y minas para socavar las murallas. Además, los mongoles emplearon arqueros y fuerzas de caballería para bloquear los suministros de la ciudad y cortar las rutas de escape. A pesar de las fuertes defensas, la ciudad cayó en 1233, y poco después, los mongoles continuaron con la conquista de las provincias restantes de la dinastía Jin, lo que culminó en la caída de la dinastía en 1234.

Ilustración del asedio mongol a Kaifeng (1232-1233).

Ilustración del asedio mongol a Kaifeng (1232-1233).

Tras la caída de la dinastía Jin en 1234, Ögedei Khan convocó un kurultai para consolidar su poder y trazar el futuro del Imperio Mongol. Este kurultai no solo marcó el fin de la lucha contra los Jin, sino que también definió la estructura administrativa del imperio. Durante la asamblea, se discutieron temas clave como la distribución de los territorios conquistados, la organización de los ejércitos y la planificación de futuras campañas militares, especialmente hacia el oeste. Además de las conquistas militares, Ögedei Khan también se dedicó a la organización interna del imperio. Durante su reinado, impulsó un sistema administrativo que permitió un gobierno más centralizado y eficiente. Creó una estructura de impuestos, mejoró las comunicaciones mediante un sistema de mensajeros y estableció mercados y ferias en todo el imperio, lo que facilitó el comercio.

Ögedei también fue responsable de la creación de un sistema legal más formalizado. Aunque el "Yasa" de Gengis Kan continuó siendo la base legal del imperio, bajo el liderazgo de Ögedei, se implementaron reformas para fortalecer el orden y garantizar la justicia en todo el territorio. Esto incluyó la designación de funcionarios para administrar las diversas regiones del imperio, que estaban divididas en khanatos gobernados por miembros de la familia real y generales de confianza.

En 1236, los mongoles liderados por el nieto de Gengis Kan, Batu Kan, invadieron los principados rusos, específicamente la Rus de Kiev. En 1240, los mongoles arrasaron Kiev, la principal ciudad del reino, en una de las batallas más devastadoras de la historia medieval. Esto marcó el comienzo de un largo período de dominio mongol en la región, conocido como la "Yugo Tártaro". El avance hacia Europa continuó, y los mongoles llegaron hasta, Bulgaria, Cumania, Vladimir, Riazán, Smolensk, Chernigov. También llegaron hasta Hungría y Polonia a los cuales les vencieron con una coalición de alemanes, polacos, húngaros, cruzados, etc. Los de Novgorod se rindieron ante los mogoles.

Para someter a los pueblos de Europa del Este y Rusia, los mongoles usaron una combinación de tácticas brutales, como saqueos y masacres, junto con un sistema administrativo para garantizar la lealtad a largo plazo. Tras la destrucción de ciudades clave, como Kiev, Vladimir y Riazán, los mongoles permitieron que los príncipes locales conservaran su poder, pero bajo la condición de pagar tributos y someterse al dominio mongol. Crearon cargos como los baskaks, funcionarios mongoles encargados de recolectar impuestos y supervisar la administración local, asegurando que las regiones conquistadas se mantuvieran bajo control. Además, los mongoles emplearon el sistema de títulos y privilegios para los líderes locales que aceptaban su dominio, lo que fomentaba la lealtad y mantenía el orden en sus dominios recién conquistados. Más tarde, en 1243, los mongoles derrotaron al Sultanato de Rum en la Batalla de Köse Dağ, un estado que estaba muy cerca de los debilitados bizantinos.

En 1241 Ögedei Khan murió repentinamente a la edad de 55 años. Su muerte dejó al Imperio Mongol en un estado de incertidumbre, y el avance hacia Europa se detuvo, ya que los líderes mongoles regresaron a Mongolia para elegir a su sucesor. Esto llevó a la fragmentación administrativa en dos grandes hordas que lograron consolidarse. Batu Khan continuó liderando las incursiones hacia el oeste con la Horda Azul, que fue liderada por Batu Khan, abarcaba el territorio de la Rus de Kiev, Europa del Este, y parte de Asia Central. Batu Khan continuó su avance hacia el oeste y se consolidó como el líder de lo que más tarde se llamaría la Horda de Oro. La Horda Blanca fue liderada por Orda Khan, hermano de Batu Khan, y abarcaba territorios en Asia Central y las estepas del norte, lo que más tarde se consolidaría como parte de la Horda de Oro.

Tras la muerte de Ögedei Khan en 1241, su esposa, Töregene Khatun, asumió un papel crucial en la sucesión. Aunque Ögedei había designado a su hijo Güyük Khan como su sucesor, el proceso de sucesión no fue inmediato debido a la política interna y las luchas de poder dentro del Imperio Mongol. Al principio, Töregene Khatun actuó como regente, controlando los asuntos del imperio mientras su hijo Güyük no estaba en condiciones de tomar el poder.

Töregene aprovechó su influencia y poder para asegurarse de que su hijo fuera nombrado Gran Khan, aunque hubo oposición de otros miembros de la familia imperial, especialmente de sus sobrinos, como Kublai Khan. A pesar de los desacuerdos, Güyük Khan fue finalmente proclamado Gran Khan en 1246, pero su reinado fue relativamente corto, marcado por tensiones internas y rivalidades entre los distintos miembros de la familia real.

Batu tenía ambiciones para convertirse en Gran Khan y liderar todo el imperio, lo que lo puso en conflicto con otros miembros de la familia de Gengis Khan, especialmente con Güyük Khan, quien había sido proclamado como sucesor de su padre Ögedei. La disputa por el trono culminó con la muerte de Güyük Khan en 1248, lo que dejó vacante el cargo de Gran Khan. A pesar de las tensiones, Batu no pudo lograr el poder en ese momento debido a que los otros khanes no lo apoyaban completamente. Eventualmente, Möngke Khan, otro hijo de Tolui (hijo de Gengis Kan) y hermano de Kublai Khan, fue elegido como Gran Khan en 1251 en parte gracias a Batu Khan, en un kurultai (asamblea) que se celebró para resolver la disputa de sucesión. Möngke fue coronado y comenzó su reinado, lo que marcó el comienzo de una nueva etapa en el Imperio Mongol.

ATRÁS

los hechos resumidos datan desde el año 1227 hasta el año 1251

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